Todos los que poseen un vehículo tienen, o deberían tener, la responsabilidad de atender las cosas que le ocurren al auto. Estar pendiente ayuda a anticiparse a averías mayores y al mismo tiempo, te podría hacer ahorrar tiempo y dinero, dado que hay tareas que perfectamente puede realizar uno mismo.
Conocer las partes del auto y cómo funciona un motor, ayudará a que entiendas lo que ocurre y por qué; a la vez que comprenderás lo que te dice el mecánico en caso de haber un problema más grande.
Frente a esta situación, te dejamos 10 tips sobre mecánica que te van a servir a ser un dueño más responsable, pendiente e inteligente. Claro, inteligente porque vas a poder anticiparte a las fallas, vas a pasar menos rabias y disfrutarás más el andar de tu auto.
A quién no se le ha pinchado un neumático. Es un clásico problema que le puede pasar a cualquiera que tenga vehículo. Para cambiar una llanta que está pinchada o reventada haz lo siguiente:
Para evitar pinchazos es importante que tengas cuidado con baches en el camino y cualquier otro elemento que pudiera dañar algunos de los neumáticos. A la vez, tienes que andar con la presión de adecuada en tus ruedas. Generalmente en el manual, o a veces en la puerta, se señala cuánta presión de aire deben tener los neumáticos de un determinado modelo. Si no aparece esa información es bueno tener como referencia lo siguiente:
Si tienes un vehículo, debes preocuparte todo el tiempo que sus niveles, ajustes y demás estén en orden con la intención de evitar tener que ir hasta un taller por fallas completamente evitables.
Una de las revisiones fundamentales son los fluidos involucrados en el funcionamiento de un auto. Estas revisiones deben hacerse periódicamente y sí o sí cuando hagas un viaje largo.
Con el motor frío revisa el nivel del líquido refrigerante, que debe estar idealmente al máximo, igual que el líquido de frenos. También, siempre con el motor frío, revisa el nivel de aceite de motor, el cual tiene un nivel mínimo de tolerancia; pero al igual que el resto debe estar al máximo. Respecto del lubricante no te pases del máximo, puesto que podrías dañar las válvulas.
El aceite de la caja de cambios tiende a revisarse menos, porque es bastante más eterno y corre menos riesgos que los demás líquidos. Lo importante es asomarse por abajo del auto y ver si presenta fugas en la transmisión, sea dentro de la caja de cambios, o bien en las salidas de las homocinéticas a las ruedas.
Revisar la amortiguación es fácil. Mueve el auto; no puede rebotar mucho y debe volver a su posición de reposo. A la vez si está demasiado dura la suspensión, también es signo de falla. En estos casos el arreglo siempre es reemplazar.
¿Te quedaste sin batería? Si te ocurre esto se puede pasar fácilmente corriente desde la batería de otro auto. Esta maniobra no implica casi ningún riesgo para los vehículos involucrados.
Si el auto se quedó sin poder partir por tener la batería descargada, entonces busca otro auto que te pueda asistir. Da lo mismo el tamaño, todos los autos pueden ayudar a otro.
Ubica ambos autos lo más cerca posible y procura que las baterías también queden cerca entre sí. Todos los autos ubican sus baterías en lugares diferentes.
Con los autos apagados, enchufa los extremos del cable en cada una de las baterías. El color rojo va en el positivo y el negro en negativo. Ten mucho cuidado con que no se junten nunca los extremos positivos y negativos entre sí, dado que pueden hacer corte y arruinar algún accesorio.
Es decir, cuando estén los cables enchufados en una de las baterías, procura que no se junten en el otro extremo el positivo y negativo, ahí podría haber problemas.
La alineación y el balanceo son mantenciones muy importantes en el andar de un vehículo. Cuando no se hace la alineación y balanceo se pueden experimentar varias sensaciones, tales como:
Si bien la alineación y balanceo se hace en un lugar especializado, es bueno que atiendas los síntomas, puesto que si no lo haces se pueden ver afectados elementos de dirección, suspensión y neumáticos.
El panel de instrumentos en el tablero del auto, entrega bastante información, algunas fundamentales para el funcionamiento del auto y otras no tanto.
Entre las luces testigo que inciden directamente en el funcionamiento del vehículo podemos encontrar:
Luz de batería: Indica problemas en la carga de la batería, o peor aún problemas del alternador.
Luz de temperatura: Si se enciende, quiere decir que hay problemas en el sistema de refrigeración. Falla que debes atender inmediatamente, sino el líquido refrigerante se puede evaporar; afectando severamente al motor posteriormente. El problema puede ser en el radiador, bomba de agua, termostato o algún sensor de temperatura.
Luz frenos: Indica que está el freno de manos puesto, o bien puede encenderse la luz testigo de los frenos ABS, la cual indica que el sistema ABS propiamente tal tiene problemas.
Luz Check Engine: Esta luz avisa sobre problemas en la ECU o computador del auto y puede avisar desde los problemas más leves, hasta los más complicados. Un problema en un sensor o en el aire acondicionado, podría encender este testigo, pero también uno más severo al interior del motor. Para saber qué ocurre, lo mejor es hacer un scanner automotriz.
Luz de aceite: La luz del aceite se enciende cuando hay fuga de lubricante o el nivel llegó a menos del mínimo. Si se enciende detente de inmediato y revisa si hay fugas o si puedes rellenar el depósito.
Luz puertas: Simplemente indica que hay una puerta abierta o mal cerrada. También hay una del cinturón de seguridad que acusa que los ocupantes del auto van sin cinturón.
Luz de otros accesorios: Los modos de conducción ECO o Sport; el airbag, el control de tracción o estabilidad, entre otros, podrían tener luces testigo que indican el modo en el que se conduce.
Luz combustible: Esta luz indica que el estanque de combustible está con menos del 10% de su capacidad. Si se enciende busca una gasolinera inmediatamente. Nunca es bueno andar con muy poca gasolina, podrías ensuciar filtros o sensores.
El cambio de aceite se hace periódicamente y en la mayoría de los casos cada 10.000 kilómetros. Antes, incluso se hacía cada 5.000 kms. Es importante hacerlo a tiempo, dado que con el paso de los kilómetros el lubricante pierde viscosidad, haciendo al motor más vulnerable a fundirse.
Idealmente, se recomienda cambiar filtro de aceite, gasolina y aire en cada cambio de aceite. Hazlo así también, tu vehículo andará mejor.
Las bujías, los cables, sensores y lubricantes son parte del afinamiento que se le hace a los vehículos. El cambio de bujías y cables van a mejorar la combustión del auto y por supuesto su andar.
Bujías en mal estado, podrían hacer salir olor a gasolina o humo negro por el tubo de escape. A la vez sentirás el auto más pesado. En tanto, malos cables de batería harán que el auto dé tirones.
Revisa bien el número de serie que usa las bujías de tu auto. A veces son casi iguales dos bujías en su numeración, pero en la práctica son completamente diferentes. Intenta usar la misma bujía que indica el manual del fabricante.
Esta mantención es mayoritariamente correctiva, puesto que los faroles solo se reemplazan cuando se queman o se quiebran. Para hacerlo, hay que sacar el foco completo. En los autos más antiguos era más simple, ya que solo había que quitar la mica frontal en la mayoría de los casos.
Los limpiaparabrisas son los más simples de reemplazar, pero preocúpate de comprar unos de buena calidad, dado que los más baratos pueden estar fabricadas con caucho de mala calidad que no va a hacer más que ensuciar más el parabrisas.
Generalmente los limpiaparabrisas se cambian con unos broches que tienen los brazos del limpiaparabrisas del auto. Son dos clic y listo, no tiene demasiada ciencia.
Siempre quédate atento a cualquier estímulo extraño que sientas. Los autos modernos son bastante silenciosos y no vibran nada. Si sientes alguna de estas cosas es que puede haber un problema en el motor, en la suspensión o dirección. Es bastante relativo, lo importante es atender todo eso inmediatamente y no dejar que el problema se expanda.
Si sientes olor a gasolina o un olor similar al de un guiso de verduras, es porque tienes problemas de combustión, en el caso del olor a combustible, o bien fuga de lubricante de la caja de cambios, cuyo aceite tiene ese olor a guiso.